Pues bien, estudios recientes apuntan justo lo contrario. En muchas circunstancias, estar de mal humor tiene muchos más beneficios sociales y físicos de los que podemos imaginar.Entre otras cosas, el vivir "peleado con el mundo" nos hace personas mucho más creativas, objetivas y sensatas.Así que, si eres un cascarrabias no te preocupes ni te avergüences por ello, ya que hay muchos beneficios a tu favor.